LABORATORIO CERTIFICADO DE ESPECTROSCOPÍA ÓPTICA
CFATAOPTICA


ANTECEDENTES
CFATAOPTICA

Los laboratorios que alberga el Centro de Física Aplicada y Tecnología Avanzada (CFATA) se caracterizan por trabajar bajo un enfoque multidisciplinario. Los distingue una vocación de servicio a la investigación y su vinculación con el sector productivo.

Mediante proyectos financiados por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y la UNAM, sus laboratorios se han equipado con tecnología de punta, lo que les ha permitido ser competitivos a nivel internacional.

A finales de la década de los noventa el Laboratorio Certificado de Espectroscopia Óptica adquirió su primer equipo de espectroscopía infrarroja, posteriormente incorporó la espectroscopía Raman. Ambas técnicas permiten identificar enlaces químicos presentes en alguna muestra, cuya presentación puede estar en estado sólido, líquido, película o polvo.

Tanto la espectroscopía infrarroja como la espectroscopía Raman están certificadas bajo la norma ISO 9001:2008 para Sistemas de Gestión de la Calidad. La certificación garantiza que los servicios analíticos tengan un control de calidad adecuado que no altere los resultados de la prueba, diagnóstico e identificación de los enlaces químicos.

La espectroscopía infrarroja permite identificar los enlaces químicos presentes en la materia, se basa en la interacción de luz infrarroja con los objetos. Se utiliza en los laboratorios de control de calidad de industrias como la farmacéutica, cosmetológica, de alimentos, química de polímeros y de servicios periciales.

La espectroscopía Raman se basa en el fenómeno físico de la dispersión de luz para analizar materia orgánica e inorgánica. Permite estudiar una gran variedad de muestras con poca o nula fluorescencia, apoya en la verificación de reacciones químicas y analiza polímeros y sus modificaciones. La implementación de esta técnica permite analizar muestras como lípidos, proteínas y carbohidratos presentes en plantas, tejidos animales y vegetales, así como piel, músculo, sangre y huesos.

¿Quiénes pueden disponer de esta tecnología?

Aquellas empresas que requieren tener un mejor control de calidad en sus productos o que tenga en marcha un nuevo proyecto. Investigadores o académicos que estén llevando a cabo alguna investigación.