La gran mayoría de la materia en el Universo se encuentra ionizada. Es interesante saber que incluso los iones negativos son

abundantes en el espacio interestelar. En el laboratorio estudiamos interacciones de iones atómicos y moléculares con gases a

velocidades similares a las del viento solar. De la información que obtenemos de los experimentos, podemos contestar preguntas

como: ¿Cómo se forman los iones negativos en las atmósferas? ¿Qué estado interno tienen los iones? o ¿Cuánto tiempo permanecen

en estado iónico? Las respuestas a esta clase de preguntas ayudan a comprender aspectos fundamentales de los plasmas y de

diversos ambientes atmosféricos, como la atmósfera de Titán. Entre otros. 

Desarrollar conocimiento novedoso en el campo de física atómica. Por ejemplo, hemos descubierto estados metaestables, hemos logrado medir 

vidas medias de iones negativos, hemos observado interferencia cuántica entre estados finales de disociación y hasta descubrimos un

ión nuevo. También, queremos formar estudiantes al mejor nivel. Quizás este objetivo es la misión más importante: contribuir a formar

científicos en la UNAM.